Desde finales de 2020, el desempeño de la economía nacional ha estado en medio de la discusión por su rápida recuperación y su retorno a la senda de crecimiento, en un escenario marcado por una compleja situación fiscal. No obstante, esa discusión se ha dado sin profundizar en el impacto que tal desempeño y situación han tenido sobre las transacciones de intercambio que mantiene Colombia con el resto del mundo.
Lo anterior llama la atención, en tanto la dinámica y coyuntura nacional e internacional son factores determinantes en las relaciones de intercambio del país. Dado que impactan las decisiones de consumo e inversión de los hogares, productores, inversionistas, organismos multilaterales, entre otros. Eso se hace evidente al observar el comportamiento y los cambios que ha registrado la cuenta corriente de Colombia desde la pandemia hasta el primer semestre de 2022. Periodos en los que el déficit de la cuenta disminuyó a 3.5% del PIB a cierre de 2020, para luego incrementar a 5.6% del PIB a cierre de 2021 y posteriormente ubicarse en 5.9% del PIB en el primer semestre de 2022.
En este Comentario Económico del Día, analizamos el desempeño de la cuenta corriente en los últimos dos años, identificando los factores que llevaron a la disminución y posterior apertura del déficit. De igual forma, evaluamos el comportamiento de la cuenta a lo largo del primer semestre de 2022, teniendo en cuenta cada uno de sus componentes para identificar si existe o no un cambio de tendencia. Con eso presentamos nuestras perspectivas para el cierre del año y lo que se espera para 2023 en este frente.