En declaraciones recientes el presidente Gustavo Petro ha anunciado que una de sus propuestas en el tema pensional es otorgarle una mesada de $500.000 a tres millones de adultos mayores que hoy no disfrutan de una pensión. Para financiarlo propone utilizar parte del aporte que hacen hoy los afiliados a fondos de pensiones del Régimen de Ahorro Individual (RAIS). Es decir, los más de $18 billones (1.5% del PIB) anuales que costaría la propuesta se financiarían con el flujo del ahorro privado de los individuos afiliados actualmente al RAIS. Dichos recursos pasarían a Colpensiones para distribuirse entre aquellas personas en edad de pensión que no reciben ingresos.
Si bien es claro que brindar una mesada a los adultos mayores en vulnerabilidad es loable y la apoyamos, como lo hemos venido proponiendo en ANIF, el mecanismo mediante el cual se pretende financiar la propuesta no es el correcto y sería un error severo. Es decir, la discusión no es la propuesta sino la manera de implementarla y financiarla. La forma con la que el presidente propone financiar la propuesta de pensión universal acabaría con el ahorro corriente del sistema pensional, aumentaría la deuda pensional del país e iría en detrimento de las finanzas públicas en el largo plazo.
En este Comentario Económico del Día analizamos en detalle los principales problemas de la manera cómo el actual gobierno propone financiar el plan pensional universal y explicamos por qué sería un grave error. Sumado a eso, hacemos recomendaciones de cómo avanzar en la lucha contra la pobreza en los adultos mayores, aumentando la cobertura del sistema pensional y su equidad sin poner en riesgo la sostenibilidad de todo el sistema.