La coyuntura del cambio de administración en el Gobierno central ha empañado los espejos retrovisores. Ya no se habla de lo sucedido durante los últimos cuatro años. Lógicamente, el debate se volcó a las propuestas del nuevo gobierno y sus planes para el futuro del país. Hoy parece mentira que hace apenas dos años el país atravesaba una de sus crisis más profundas y el desafío más grande, el manejo de la pandemia. La emergencia sanitaria puso a prueba como nunca antes al sistema de salud colombiano, el mismo del que tanto se habla actualmente, además de imponer un costo económico significativo sobre los hogares y el gobierno.
La pandemia ya no parece hacer parte de la cotidianidad. Las cifras de enfermedades y defunciones perdieron su protagonismo. El tapabocas ha quedado relegado, un accesorio ajeno al día a día. Sin embargo, el fin de la pandemia no implica dejar de hablar de lo sucedido. En ANIF consideramos que siempre valdrá la pena el estudio histórico, pues varias de las decisiones que se tomaron en su momento marcarán el curso de las generaciones que vendrán. Por ese motivo, en este Informe Semanal evaluamos el desempeño del servicio público durante la pandemia, resaltando las políticas implementadas en los tres episodios claves de la crisis: el golpe inicial, la resolución y la recuperación.